BLEFAROPLASTIA
PARA HOMBRES
Los ojos son uno de los rasgos faciales más distintivos y en el ámbito de las interacciones sociales, son centrales en la comunicación no verbal. También son casi siempre el primer rasgo facial en envejecer. Entre los 20 y los 30 años, se empiezan a ver las arrugas alrededor de los ojos y las líneas de expresión en la frente. Luego, la piel se hace más delgada, la frente desciende y causa que las cejas empiecen a caer. Posteriormente, un exceso de piel se acumula alrededor de los ojos y estos pueden verse abultados. Todo esto puede generar un aspecto cansado, triste, enojado y con ausencia de vigor, que en el contexto de la comunicación con otras personas puede tener efectos negativos. Muchos hombres pueden presentar bolsas debajo de los ojos o exceso de piel en los párpados superiores y en muchos casos son debido a la genética. En algunos casos, el exceso de piel es tan grande que puede afectar la visión periférica.
Estas condiciones pueden ser corregidas con la blefaroplastia, la cual es un procedimiento quirúrgico mínimo que puede generar un cambio muy favorable en el aspecto de cualquier hombre. Es una de las cirugías plásticas faciales más frecuentes y consiste en remover el exceso de piel, músculo y grasa en los párpados superiores o inferiores. Se puede llevar a cabo bajo anestesia local o general, de acuerdo al plan quirúrgico, al paciente y a la preferencia del cirujano. Durante la cirugía, se realizan incisiones en los pliegues naturales del párpado con el fin de que no sean visibles cuando hayan curado. El cirujano remueve el exceso de piel, músculo y grasa que considere necesarios, basándose en la evaluación preoperatoria de factores como estructura muscular facial, estructura ósea y la simetría de las cejas, así como también el mantenimiento de una apariencia masculina.